Somos una empresa familiar
¡Y aquí estamos y nos alegra que estés con nosotros!
Tenemos quince años rodando. Quizás nos conociste en nuestra faceta anterior… tuvimos hasta Junio del 2019 una tienda en la Roma, cerquitita de los famosos tacos del Jarocho. Por años, nuestros vecinos fueron muchos de nuestros clientes. Nos lanzamos a vender bicicletas cuando aún no existía la Eco Bici en la Ciudad de México.
Somos una empresa familiar. A raíz de muchos viajes a China, el tío Juan volvió en una ocasión con una bicicleta eléctrica doblada dentro de su maleta.. era 2008, ¿por qué no traerlas a México? y así inició la aventura. La vecindad donde vivíamos, un día se llenó de las primeras 50 bicicletas eléctricas plegables que probablemente se importaron al país; ¡ni siquiera existía una clasificación arancelaria! Luego vino la tienda, y con la tienda, el ímpetu de hacer nuestro negocio más sencillo; comenzamos a fabricar pruebas de bicicletas plegables sin motor. Y después de incontables horas en la fábrica en Atizapán, cómo olvidar aquella vez que el tío Juan se subió a uno de los primeros prototipos, y a medida que iba pedaleando, la bicicleta se desmoronaba. Y así muchos frankensteins tuvieron vida, hasta llegar al modelo funcional que tenemos hoy.
