En marzo de 2009, Zaraí y su tío Juan firmaron como socios ante notario los estatutos de la empresa Alter Buy S. de R.L. de C.V. Recuerdo todavía del tiempo que pasamos para encontrar un nombre comercial y empezar a desarrollar la idea de nuestra marca de bicicleta: Alterbike®. Queríamos en un principio ofrecer productos alternativos al mercado mexicano, ser una marca internacional (por eso el inglés), exponer nuestro valor de interculturalidad y democratizar el uso de la bicicleta en México. El reto parecía simple: aportar una alternativa a las problemáticas ambientales (trafico y contaminación) y de salud (México tenia el lugar Nº1 en obesidad infantil a nivel mundial en el 2010). Juan fue el que aporto la parte financiera, Zaraí armó la administración de esta empresa y yo, Julien, me metí sin hablar español en la búsqueda inalcanzable de proveedores. 

Empezamos a importar bicicletas plegables eléctricas que el tío Juan había encontrado una vez en un viaje de negocio a China. Desafortunadamente, a pesar de vender un poco, este modelo de bicicleta era demasiado anticipado para el mercado. En el 2010, participamos a la primera Bici Expo Reforma, México, D.F.,  donde se nos acercaron los dueños de nuestra actual fabrica para ayudarnos a desarrollar un modelo de bicicleta nacional, ¡hecho en Atizapán de Zaragoza! A finales de 2010, después de numerosas pruebas y errores (rompimos muchos cuadros de prueba), unos dibujos técnicos del tío Juan (el es ingeniero industrial), sacamos un modelo plegable (no eléctrico) al mercado y empezamos a vender muy bien. 

En la inauguración del local comercial. Mayo del 2009
¡Las primeras bicis que importamos de China!

Abrimos entonces nuestra tiendita de 60m2 en la colonia Roma, CDMX, donde logramos crecer bastante. Llegamos a manejar un catalogo de 17 modelos de bicicletas, organizar una red nacional de distribuidores, tener un taller mecánico con nuestra propia marca Doctor Bike®, vender bicicletas al gobierno y ofrecer toda una gama de artículos y refacciones a nuestra clientela ¡Hasta exportamos a Francia! Recuerdo el ritmo infernal de abrir diario la cortina, limpiar, organizar las compras, recibir los clientes, contar inventarios, hacer crecer el equipo, resistir durante los meses bajos en venta (a pesar del estrés de no poder pagar sueldos), explotar de felicidad cuando un cliente se llevaba 5 bicicletas en una sola compra, tomar un café con los vecinos en la tienda, motivar al equipo, proyectar gastos y ventas, recibir viajeros de todo el mundo en la tiendita… Hasta el 2014 crecimos muy bien, cada año contratábamos un stand mas grande en la Bici Expo y nuestro equipo de ventas se independizó para que la tienda se manejara sola. Empezamos a automatizar nuestros procesos y a optimizar nuestra actividad con la intención de abrir una nueva tienda. Desafortunadamente, en el 2014, justo antes de la Bici Expo en el WTC CDMX, sufrimos de un robo total de nuestra tienda, y es justo en ese momento cuando el tío Juan decidió abandonar la locura del emprendimiento, vendiéndonos algunos meses después sus acciones. A pesar del golpe, decidimos seguir, Zaraí y yo, empezando de nuevo desde cero, solos y con poco material en inventario. Recuerdo instalarme detrás del brazo mecánico un domingo, casi llorando de furia, para armar bicicletas y cumplir con los pedidos firmados durante la Bici Expo (¡una excelente lección de humildad!).

Lo que nos salvó fue la solidaridad de los Mexicanos; los vecinos de la Roma me decían que no podía abandonar, Damián Alcazar, el actor mexicano, ¡vino con su familia para comprarme 8 bicicletas! Es un verdadero ciclista cuando esta en su barrio de la Roma, muchas veces nos dejó bicicletas en reparación, ¡es un tipazo! Seguimos así 3 años más estabilizando el negocio y contratando un equipo sólido que hizo un trabajo fenomenal con mucho valor humano en el trabajo. Aun así, sabíamos que teníamos que evolucionar y darle un giro a nuestro negocio, esto fue nuestra pesadilla durante mucho tiempo. 

En el 2017, el terremoto golpeó muy fuerte varias zonas de la Ciudad de México, incluyendo a la colonia Roma y la calle Manzanillo (donde se encontraba la tienda), estuvo cerrada durante casi tres meses. Las ventas cayeron junto con nuestra capacidad de seguir pagando gastos fijos siempre mas altos… A pesar de eso, decidimos seguir; nuestros empleados le dieron duro para mantener el barco a flote. En paralelo, Zaraí, emprendedora social, estaba desarrollando un nuevo modelo de negocio. Desde que nos asociamos, siempre había dicho que quería inyectar mas impacto social en nuestro negocio. Por mi parte, estaba buscando nuevas soluciones para hacer crecer el negocio, empecé a  aprender y capacitarme en lo digital y las DNVB (Digitally Native Vertical Brand), marcas digitales quienes crecen mucho en el mercado de las ventas en línea (e-commerce) en Europa y USA desde hace algunos años. 

BOOM! Al principio del año 2018, vivimos de nuevo esta chispa emprendedora que solamente los socios entienden cuando logran compartir una visión común de negocio. 

Desde entonces, no hemos parado. Zaraí formalizó un proyecto social donde damos una segunda oportunidad (¿o tal vez la primera?) a ex privados de libertad a través de la reinserción social y el oficio de mecánica de bicicletas. También, decidimos cerrar la tienda (2019), eliminar nuestros gastos fijos (sin correr a nuestros empleados), para dedicarse 100% a las ventas en línea, a través de un circuito corto de venta directo de la fabrica al cliente por paquetería. Ahora fabricamos un solo modelo de bicicleta plegable, ha sido  nuestro modelo estrella desde que empezamos a producirla. Esta bicicleta se fabrica y se comercializa gracias a 10 personas en la fabrica (pero trabajan para otras marcas también), 4 personas (Brenda, Isaac, Francisco y Alejandro) están en nuestra oficina para encargarse de la mercadotecnia, las ventas y en el caso de Brenda, del programa de reinserción social desde la ciencia de la psicología; 1 mecánico (Pepe) quien esta en el taller de armado y 2 personas en la agencia de comunicación que se llama Chulería (Pao & Juan).

Soñar es importante, creer en lo imposible también. En el 2020, en plena crisis del covid-19 (Coronavirus), estamos lanzando nuestro nuevo modelo de negocio con una visión del mundo diferente a la que teníamos hace 10 años. Decidimos entonces vender 100% en línea en nuestra pagina www.alterbike.mx, con un servicio al cliente directo por WhatsApp, con una entrega directa de la fabrica a la puerta del cliente, una prueba de 10 días hábiles con devolución, y sobre todo ¡una experiencia única! Contamos contigo para acompañarnos en esta nueva aventura, queremos lograrlo contigo, sabemos que podemos provocar el cambio con nuestra bicicleta. #provocaelcambio #ridewithpurpose

Julien Cariou

Cofounder

julien@alterbike.mx

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